El asambleísta Sergio Peña, miembro electo por la lista nacional de la Revolución Ciudadana (RC), ha manifestado públicamente su inconformidad con el manejo interno de su bancada, calificándolo de «dictatorial». Su voto a favor del informe para el primer debate de la Ley Urgente para Erradicar las Economías Criminales, impulsada por el presidente Daniel Noboa, desató críticas por parte de la cúpula del correísmo, incluyendo al expresidente Rafael Correa, quien lo tildó de «vulgar oportunista» .
Peña ha señalado que su decisión se basó en la inclusión de observaciones realizadas en la Comisión de Desarrollo Económico, y que no fue el único asambleísta de RC en apoyar la iniciativa, mencionando también a Jesús Arias. Sin embargo, considera que fue blanco de ataques por su postura crítica y por no alinearse con las directrices impuestas por la dirigencia del movimiento. Afirma que en RC «es un delito pensar» y que existe una resistencia al surgimiento de nuevos liderazgos .
Estas declaraciones reflejan tensiones internas dentro de la Revolución Ciudadana, evidenciando una posible fractura entre la dirigencia y algunos de sus miembros. Peña advierte que, de no haber un recambio generacional y una apertura al debate interno, el movimiento corre el riesgo de repetir la historia de partidos que se desvanecieron por falta de renovación y autocrítica .