Elon Musk promete $1 millón diario al alzar para votantes de Trump.

Elon Musk, el magnate tecnológico y CEO de empresas como Tesla y SpaceX, durante un mitin en Pensilvania, prometió regalar $1 millón diario a los votantes registrados en estados clave como parte de una petición en favor de la Primera y Segunda Enmienda. Aunque esto ha motivado a muchos, expertos en leyes electorales señalaron que podría violar la normativa federal que prohíbe pagar por el registro o el voto.

La legislación estadounidense considera un delito ofrecer pagos a cambio de votos o registros, y aunque los sorteos no están prohibidos en sí, el enfoque de Musk hacia votantes de ciertos estados podría interpretarse como un intento de influir en los resultados de la elección presidencial. Esta estrategia tiene el potencial de alterar significativamente la dinámica de la campaña, especialmente en un momento en que la participación electoral es vital. El programa está limitado a votantes registrados en estados clave como Pensilvania, Georgia, Nevada, Arizona, Michigan, Wisconsin y Carolina del Norte, donde las diferencias de votos pueden ser determinantes.

Varios expertos, incluyendo Rick Hasen de la Facultad de Derecho de la UCLA, calificaron la oferta de Musk como «compra de votos ilegal». A pesar de que la posibilidad de un procesamiento al magnate parece baja, otros expertos, como David Becker, exfuncionario del Departamento de Justicia, coinciden en que este sorteo podría violar el espíritu de las leyes que protegen el proceso electoral.

Además, esta alianza entre Musk y Trump podría fortalecer la imagen del expresidente entre votantes interesados en la innovación tecnológica y la economía. No es la primera vez que el multimillonario muestra afinidad por políticas que abogan por la desregulación y la promoción de los negocios, áreas que Trump ha apoyado durante su tiempo en la presidencia.

Queda por ver si esta estrategia realmente tendrá el impacto que Musk espera o si provocará un efecto contrario, movilizando también a quienes se oponen tanto a Trump como a este tipo de maniobras en el proceso electoral. Lo que es seguro es que el respaldo de una figura tan influyente en el mundo de la tecnología no pasará desapercibido en el desarrollo de la campaña presidencial.