Tener conversaciones difíciles con preadolescentes y adolescentes puede ser un desafío, pero es fundamental para su desarrollo. Aquí hay algunas estrategias que pueden ayudarte a conectar con ellos y facilitar el diálogo sobre temas complicados como drogas, sexo o salud mental:
- Escucha activa: Presta atención a lo que dicen y muéstrales que valoras sus opiniones. Esto les ayudará a sentirse comprendidos y más dispuestos a abrirse.
- Crea un ambiente seguro: Asegúrate de que se sientan cómodos y sin juicio. Esto les permitirá hablar más libremente sobre sus preocupaciones.
- Sé honesto: Comparte tus propias experiencias y dilemas de manera que puedan relacionarse. La honestidad puede fomentar la confianza.
- Haz preguntas abiertas: En lugar de hacer preguntas que puedan responderse con un «sí» o «no», formula preguntas que los animen a explicar sus pensamientos y sentimientos.
- Mantén la calma: Si la conversación se torna difícil, es importante mantener la calma y no reaccionar de manera exagerada. Esto ayudará a que el adolescente se sienta más seguro al compartir.
- Educa sin sermonear: Ofrece información y recursos de manera informativa y no crítica. Esto puede ayudarles a tomar decisiones más informadas.
- Sé paciente: A veces, los adolescentes necesitan tiempo para procesar la información y puede que no estén listos para hablar de inmediato.
Conectar con los jóvenes a través de estas estrategias puede ser clave para guiarlos hacia decisiones responsables y saludables.