El 10 de diciembre de 2025, Daniel Noboa estuvo presente en Oslo durante la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz a María Corina Machado, premio otorgado por su labor a favor de los derechos democráticos en Venezuela. A través de sus redes sociales, el mandatario extendió su felicitación y aseguró que este reconocimiento representa “una causa común: la de una región que se une, se levanta y avanza hacia un futuro donde la libertad y la dignidad sean innegociables”.
Aunque la galardonada no pudo acudir en persona a la ceremonia —por motivos vinculados a su seguridad y situación legal en Venezuela— su hija recibió el premio en su nombre, en un acto simbólico de solidaridad con la causa democrática. En ese contexto, Noboa valoró la entrega como un mensaje de apoyo a los pueblos que luchan por libertad y justicia, y expresó su respaldo a los ideales de democracia para toda Latinoamérica.
El gesto del presidente ecuatoriano refuerza la dimensión internacional del premio, situándolo no solo como un reconocimiento individual, sino como un símbolo de unidad regional en defensa de los derechos humanos y las libertades democráticas. La ceremonia también contó con la presencia de otros líderes latinoamericanos, subrayando la repercusión política del galardón más allá de las fronteras de Venezuela.